jueves, 5 de junio de 2008

Beat Boys, argentinos en el nacimiento de la tropicália.

Los Beat Boys eran:
Tony Osanah (guitarra y voz), Cacho Valdez (guitarra), Toyo (órgano), Willie Verdaguer (bajo) y Marcelo Frias (bateria).
Se hicieron famosos por haber acompañado a Caetano Veloso en el III Festival de Música Popular Brasileira da TV Record, en 1967, interpretando Alegria, alegria. Después del festival graban el rarísimo simple (en formato de disco, porque el tema es medio un delirio) Questão de Orden, con Gilberto Gil.
Eso es lo que siempre se dice cuando se habla de ellos. ¿Pero cómo llegaron estos argentinos a estar en el comienzo mismo de la tropicália?
En realidad, la banda se formó con músicos que tocaban habitualmente en la mítica Cueva de la calle Pueyrredon, en Buenos Aires y se largaron a Brasil cansados de tanta persecución policial, según se desprende de las palabras de Billy Bond:
“Llego un momento que la policía venía todos los días, se puso insoportable y los chicos, en vez de parar en la esquina empezaron a encontrarse en La Perla del Once. En ese momento Cacho Abbas que tocaba la guitarra en los Guantes Negros, nos quiere llevar a todos a San Pablo. Yo le digo que no porque no sabía el idioma, y se van Willy Verdaguer, Tonio Sanas, Raúl Frias, que era baterista de Los Sombras, y otros más de los que venían a La Cueva. Ellos se convierten en Os Beat Boys, tienen un gran suceso en Brasil y son tope del movimiento de la nueva ola. ..."
Hasta ahí todo bien, pero ¿cómo llegaron a tocar con Caetano?
El Cae había compuesto Alegria, alegria, donde citaba a Sartre (nada en el bolsillo, nada en las manos) para presentarlo en el Festival de Música de la TV Record de 1967. Estaba seguro que ese tema sería un suceso y, por qué no, un escándalo, al presentarlo en un festival que abominaba todo lo que sonara eléctrico, beat o como se llame.
Pensó en tocarlo con el grupo R C-7 (banda que acompañaba a Roberto Carlos) una elección más simbólica que musical. Fue cuando Guilherme Araújo le dijo: "encontré un grupo tocando en el Beco que es perfecto para que te acompañe en el festival".

Cuando Caetano apenas los vio se dio cuenta que Araújo estaba en lo cierto. Comparados con estos melenudos-roqueros-argentinos, el tímido conjunto de Roberto Carlos parecía una banda de evangelistas. Si aún le quedaba alguna duda, las despejó cuando los oyó tocar. Los muchachos ya revelaban una consistencia musical que era rara entre los conjuntos pop brasileños.
Roqueros convictos, los Beat Boys no quedaron muy excitados con la marchita-pop que Caetano les mostró en la guitarra. Sin embargo el estilo dulce de Caetano y el profesionalismo de Guilherme conquistaron a los cinco argentinos: Alegria, alegria ya consiguió sus guitarras eléctricas.
Video de la presentación de Caetano y nuestros héroes del día: En mayo de 1968 editan su único álbum, sin pena ni gloria. La razones pueden ser el acento medio portuñol de las voces o la inevitable comparación con Os mutantes. A pesar de todo, el disco es considerado una pieza fundamental en la psicodelia brasileña, con algunos temas verdaderamente novedosos para la época. El que más se recuerda en Brasil es Abre Sou Eu (Abre soy yo), de Billy Bond. Lo que es extraño es que el disco comience con un cover de Palito Ortega trasladado al portugués, A felicidade, aunque no es difícil sospechar las verdaderas intenciones del productor:

Para el gran Rogério Duprat "el grupo también era bueno. Pero era frío, no era quente... Era argentino... Ellos tocaban bien, pero le faltaba esa cosa inexplicable que Os Mutantes tenía. Esa grandiosidad... ingenua, espontánea, todo eso."
¿Qué paso luego con ellos?
Willie Verdaguer
y Marcelo Frias formaron parte de la banda de apoyo de Secos & Molhados. Tony Hosanna emprendió una carrera solista y en 1979, nuevamente con Willie Verdaguer y músicos chilenos y brasileños forman, a instancias del visionario empresario argentino radicado en Brasil Enrique Bergen, el grupo Raíces de América. Interpretan versiones del folklore argentino y latinoamericano: Violeta Parra, Tejada Gómez, Yupanqui, Viglietti. En su primer LP graban, paradójicamente, un tema de Geraldo Vandré, el más ferreo opositor a las guitarras eléctricas en 1967.
Este grupo continúa hasta el día de hoy, con la dirección de Verdaguer.
Pero volvamos a aquellos años. Les dejo una bonita pieza del único álbum de la banda y vale la pena escucharlo. Fíjense que en esa época no había samplers ni nada y cómo se las arreglaron: incluye guitarras de tango a lo Gardel.

Fuentes:
Libros: 'Historias del Rock de Acá'. de Ezequiel Avalos, de 1995.
“Tropicália, a história de uma revoluçào musical” de Carlos Calado, de 1997.
Web: www.jovemguarda.com.br
www.jovem-guarda.com

www.cliquemusic.uol.com.br
www.raicesdeamerica.com
www.senhorf.com.br
Queda para más adelante Billy Bond y el proto-punk en Brasil.
Y después no digan que no trabajo...

4 comentarios:

salvador dijo...

bueno, vi que nadie escribio... y pense que injusticia,
un post de lujo, buen trabajo!

charly olmo dijo...

gracias! el blog quedó medio boyando, me alegro que te haya gustado.

João Carmo dijo...

Que história emocionante. Obrigado por registra-la.

Unknown dijo...

Excelente historia!! Y sorprendente...